domingo, 23 de septiembre de 2012

Las piernas son para el verano

 Dediqué el episodio anterior a glosar el poder del nylon, y la gran capacidad de sometimiento que despliega enfundando las piernas de una Diosa para todo sumiso que sepa apreciarlo, pero en la época estival la temperatura provoca que ese complemento de Reinas desaparezca. Eso no debe ser motivo de preocupación para ningún sumiso que sepa gustar de todas las delicias que una mujer superior puede ofrecer, aparece en esta época un aditamento todavía mayor que el propio nylon, la piel sedosa de unas piernas femeninas bien torneadas, los arcos vertiginosos de unos pies desnudos sobre unas sandalias, unos dedos esmaltados con colores de todos los tonos imaginables, los mismos tacones interminables que marcan más profundamente el contorno de unas pantorrillas firmes, con sólo mencionar todo esto muchos de nosotros ya estaríamos de rodillas rindiendo pleitesía a todas estas maravillas con las que la naturaleza equipó a esas mujeres tan especiales, Queen Horten es una de ellas, y lo sabe, y sabe como utilizarlas frente a quien sea.





 Llegado el verano, decidida a mostrar al mundo de sumisos la belleza escondida durante meses de sus piernas desnudas vino hasta mi casa dispuesta a hacer una demostración de su nuevo poder. La recibí con la alegría y la expectación de contemplar la piel de sus piernas y apreciar lo pronunciado del arco de sus pies perfectos, tomó asiento en el sofá del salón y decidida en sus gestos expresó "Ya ha llegado el verano, hace calor, me he quitado las medias, ¿que te parece?", me quedé extasiado contemplándola, ella lo sabía perfectamente. Imperativa como siempre "hace tiempo que no usas la cámara de vídeo, enciéndela", obedecí  al momento con la esperanza de que me permitiera dejar evidencia de una adoración, pero no me ordenó arrodillarme, sino que toleró que me sentara a su lado, eso si, desnudo, sin mediar palabra comenzó a torturar mis pezones mezclando dolor y placer sólo como ella sabe hacerlo, hasta excitarme como también sólo ella sabe hacerlo, "ahora vas a probar la delicia de sentir el arco de mis pies haciendo estallar tu sexo, pero que no se te ocurra correrte hasta que yo lo ordene, eso quiero verlo donde yo te diga y cuando yo lo diga". Me tuvo así todo el tiempo que quiso riéndose del dominio que ejercía sobre mi y de mis esfuerzos por resistir hasta el momento que ella me tuviese reservado. Cuando se dió por satisfecha, en realidad se hacía la hora para acudir a una de nuestras cenas, y sabedora de que acabaría conmigo sin mucho esfuerzo dijo "quiero que te corras ahora, quiero ver como exprimo hasta la última gota de tu semen pero entre mis muslos, tomó la perspectiva que le pareció adecuada y con unos leves movimientos de sus muslos me hizo retorcerme de placer provocando que eyaculara de forma irrefrenable y violenta, con una sonrisa preguntó "¿Con medias es mejor no?, a veces me pregunto de que materia esta hecha Queen Horten.